Gracias a plataformas como YouTube o Twitch el dominio que tenían los estudios y las productoras ha caído ligeramente; aunque las mejores producciones siguen viniendo de ellas. Ellas se encargan de crearlo, y luego lo distribuyen a través de la TV de pago por Internet o satélite, o a través de plataformas de streaming.
Plataformas como Netflix actualmente funciona de manera centralizada; ellos crean y almacenan el contenido, el cual es enviado a su vez a los CDN y a los servidores de los operadores para poder distribuirlo a los clientes. El contenido que se ofrece, el precio, la ruta, etc, es elegido de manera centralizada y jerarquizada por parte de la dueña del contenido, tal y como explicamos aquí el pasado verano.
Gracias a la cada vez mayor presencia de redes de fibra óptica (tanto en España como en el resto del mundo), tenemos unas redes muy difíciles de saturar y que pueden permitir crear redes descentralizadas. Un ejemplo de la cantidad de ancho de banda que desaprovechamos es que la propia Movistar está estudiando convertir los routers de fibra en antenas para 5G.
Con una red descentralizada, nadie podría decidir qué contenido priorizar para que llegue antes a los usuarios, ni ninguna web podría bloquear contenido. Esto beneficiaría sobre todo a países donde apenas hay CDN, ya que el contenido se cogería de los ordenadores más cercanos.
Actualmente hay muchas aplicaciones del blockchain en el streaming de vídeo. Existen plataformas como LivePeer (basada en el blockchain de Steem) o Viuly, basado en el de Ethereum. También se está incorporando en la descarga de torrents con Tribler.
Ventajas de usar blockchain para streaming
Las ventajas de utilizar blockchain son muchas, pero entre ellas destacan:
Contenido de pago más barato: con la fragmentación de los servicios de streaming, cada vez es más complicado poder ver todo el contenido de manera legal a precio asequible. Con este sistema podrían suscribirse sólo al contenido que les interesa o al de un creador en particular. El contenido bajo demanda sería prácticamente ilimitado.
Subir contenido gratis: cualquier persona puede crear una película o serie y distribuirla a través de una plataforma descentralizada de manera inmediata, sin que tenga que pasar validación con Netflix o tener que hacer un acuerdo con ellos.
Nuevos canales: que podrían tener más fácil monetizarse y ganar dinero desde el minuto cero
Anuncios y contenido gratis: las empresas podrían anunciarse y ofrecer el dinero de esos ingresos directamente a los creadores sin que hubiera intermediarios, como ocurre actualmente con YouTube. Además, se podría pagar con criptomonedas como Ripple o RaiBlocks, que son rápidas y con comisiones irrisorias o inexistentes.
Muchos proyectos relacionados con el blockchain y el entretenimiento audiovisual verán la luz en 2019 o 2020. Algunos proyectos relacionados con esto los encontramos con Kim DotCom, con su MegaNet (internet descentralizado), o K.im, el nuevo Megaupload 2. A Netflix le costó pasar de los videoclubs al entretenimiento por streaming, por lo que es posible que todavía pasen varios años para que veamos el nuevo cambio al blockchain.
Origen aquí.
Fuente de noticias: www.adslzone.net
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